La eyaculacion retardada como disfunción sexual.
La eyaculación retardada, también conocida como ausencia de eyaculación, aneyaculación o incapacidad eyaculatoria, es una disfunción sexual incluida en la categoría de trastornos orgásmicos. En términos generales se caracteriza por la imposibilidad que experimenta el hombre para eyacular. Se considera un trastorno sexual generalmente de origen psicológico, por lo que requiere de tratamiento especializado.
Esta patología se manifiesta en la ausencia o el retraso de eyaculación durante la penetración o ante cualquier estímulo sexual de naturaleza no onanística. El paciente no puede, pues, culminar el acto sexual. La frustración que de ello se deriva afecta directamente a la práctica del sexo. Un alto índice de hombres que sufren eyaculacion retardada experimentan ciertas reticencias o miedo ante la posibilidad de manterner relaciones íntimas. En ocasiones, se consigue alcanzar un orgasmo con un esfuerzo continuado y prolongado, requiriendo más de 30 o 45 minutos para ello. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los hombres suele eyacular entre 2 y 4 minutos después de haber iniciado la penetración a un ritmo constante. El retardo sufrido estigmatiza a quien lo sufre, así como a su pareja sexual.
Si no existe una buena comunicación entre ambos, ésta puede considerar que la estimulación no es la adecuada, que existe falta de deseo o que no son compatibles en el sexo. Para intentar mitigar la sensación de frustración, pueden ponerse en práctica algunas estrategias como: fingir que se ha terminado, insistir hasta perder la erección totalmente u optar por la estimulación manual. Sin embargo, ninguna de estas soluciones parece ideal. La falta de sincronización con la otra persona puede provocar su cansancio y fatiga. La lubricación del momento del clímax tiende a desaparecer a medida que se diluye el orgasmo, por lo que la insistencia en la búsqueda de la eyaculación llega a ser molesta o dolorosa.