Si bien la autoestima, la autoconfianza y seguridad en uno mismo son términos que han sido utilizados ampliamente por los profesionales de la psicología y han calado profundamente en la sociedad, en las últimas décadas está habiendo un cambio de perspectiva importante en torno a la concepción de la autoestima…
La autoestima es la valoración general de una persona sobre sí misma.
Se considera un rasgo de la personalidad, que se desarrolla en la infancia y afecta los comportamientos, las interacciones sociales y el bienestar general de una persona.
Las personas que tienen baja autoestima carecen de confianza en sus relaciones sociales, además, en muchas ocasiones pueden sentir la mayoría de sus actos son un fracaso. Es habitual que se muestren comportamientos dependientes.
En muchos casos puede ser común que puedan perder los estribos fácilmente y culpar a otros por sus problemas. En otras ocasiones pueden tener distorsiones de la imagen corporal que les impide sentirse cómodos con su físico.