Trastornos Sexuales en la actualidad
¿Qué es un trastorno sexual? ¿Qué diferencia hay entre una disfunción y un trastorno? ¿Cómo puedo tratar mis problemas sexuales?
En nuestra sociedad, las conductas sexuales siguen siendo un tema tabú, es por ello que siguen apareciendo muchas dudas respecto a los diferentes problemas y trastornos relacionados con el sexo. Si todas estas dudas aparecen en tu mente, te recomendamos seguir leyendo este interesante artículo. En él encontrarás un amplio estudio de las disfunciones sexuales y el listado con síntomas de los trastornos sexuales según el DSM-V: el manual diagnóstico más utilizado en psicología.
Trastornos sexuales según la psicología
Por suerte, la psicología ha intentado recoger toda la información posible relacionada con la conducta y las orientaciones sexuales. Desde el psicoanálisis de Freud hasta la escala de orientación sexual de Kinsey, han sido muchos los expertos que han intentado estudiar la conducta humana del acto sexual. En la penúltima edición del manual diagnóstico DSM (El DSM-IV, publicado en 1994[1]) podemos observar que se recogieron los trastornos sexuales de la siguiente manera:
Disfunciones sexuales en el DSM-IV
Bajo el nombre de disfunciones sexuales se incluyen todas aquellas alteraciones (esencialmente inhibiciones) que se producen en cualquiera de las fases de la respuesta sexual y que impiden o dificultan el disfrute satisfactorio de la sexualidad (Labrador, 1994). En la especificación de las categorías diagnósticas, el DSM-IV (APA, 1994) se basa en el modelo trifásico del ciclo de respuesta sexual: deseo, excitación y orgasmo.
La APA recoge una categoría adicional en la que se incluyen aquellas disfunciones que suponen más que alteración de una fase de la respuesta, la aparición de dolor en cualquier momento de la actividad sexual. En consecuencia, el DSM-IV considera estas cuatro categorías principales de disfunciones:
- Trastornos del deseo sexual, que incluyen deseo sexual inhibido (o hipoactivo) y trastorno por aversión al sexo;
- Trastornos de la excitación sexual, diferenciándolo en el hombre (trastorno de la erección) y en la mujer;
- Trastornos del orgasmo, diferenciando también entre disfunción orgásmica femenina y masculina, e incluyendo además una categoría específica para el diagnóstico de la eyaculación precoz;
- Trastornos sexuales por dolor, que comprenden la dispareunia y el vaginismo.
Trastornos sexuales en el DSM-V
La última revisión del manual diagnóstico se realizó en 2014, el DSM-V contiene alguna variación respecto a los criterios diagnósticos de los trastornos sexuales definidos en el DSM-IV.
En este manual, se dividen los trastornos relacionados con la conducta sexual de la siguiente manera:
- Disfunciones sexuales: aquellas anteriormente recogidas en el DSM-IV
- Trastornos Parafílicos: trastornos relacionados con la excitación sexual no adecuada o poco normativa (fetichismos, filias, atracción inusual por objetos…)
- Disforia de género: perturbación y malestar por el género asignado socialmente al nacer. Las personas con disforia de género suelen recurrir a un cambio de sexo u optan por definirse por otro género con el objetivo de mejorar su bienestar psicológico.
Lista de trastornos sexuales comunes y sus síntomas
A continuación, ofrecemos algunos de los trastornos sexuales más comunes y cuáles son sus criterios diagnósticos:
1. Disfunciones Sexuales
Para poder diagnosticar las disfunciones sexuales que hemos ido mencionando a lo largo del artículo, se deben cumplir los siguiente criterios:
- No exista patología orgánica/ o de sustancias produzca malestar acusado dificultades en las relaciones interpersonales
- Presente en la mayor parte de las relaciones sexuales (70-80%)
- Persistencia al menos de 6 meses
2. Deseo sexual hipoactivo
- Disminución (o ausencia) de fantasías y deseos de actividad sexual de forma persistente o recurrente. El juicio de deficiencia o ausencia debe ser efectuado por el clínico, teniendo en cuenta factores que, como la edad, el sexo y el contexto de la vida del individuo, afectan a la actividad sexual.
- El trastorno sexual hipoactivo provoca malestar acusado o dificultades de relación interpersonal.
- El trastorno sexual no se explica mejor por la presencia de otro trastorno (excepto otra disfunción sexual) y no se debe exclusivamente a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., drogas, fármacos) o a una enfermedad médica.
3. Aversión al sexo
- Aversión extrema persistente o recidivante hacia, y con evitación de, todos (o prácticamente todos) los contactos sexuales genitales con una pareja sexual.
- La alteración provoca malestar acusado o dificultades en las relaciones interpersonales.
- El trastorno sexual no se explica mejor por la presencia de otro trastorno (excepto otro trastorno sexual).
4. Parafilias
- Conductas sexuales no normativas en las cuales el paciente muestra una absoluta dependencia de ese objeto o conducta para obtener placer.
- Actualmente se admite también el término adicción.
- Algunas de las parafilias más comunes son: exhibicionismo, fetichismo, frotteurismo, masoquismo sexual y sadismo sexual.
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