Qué son las bolas chinas.
Las llamadas bolas chinas, bolas de geisha o Ben Wa, que, a pesar de su nombre, no tienen su origen realmente en China, sino en Japón, aunque no hay evidencias fiables, son un mecanismo formado normalmente por una o dos bolas, unidas por un cordón, en cuyo interior se encuentra otra bolita más pequeña que choca contra las paredes de la bola que la contiene cuando, al llevarlas colocadas, la mujer camina o está simplemente en movimiento.
Las bolas chinas están huecas y contienen en su interior otra bolita más pequeña, como un cascabel.
Las bolas fabricadas en cristal, jade u otros materiales macizos, no son bolas chinas, sino pesas vaginales.
Hay mujeres que notan perfectamente cómo vibra la bolita dentro de la esfera que la contiene cuando se mueven llevándolas puestas.
Otras mujeres, debido a la debilidad de sus músculos de su suelo pélvico o a que las bolas están colocadas en el tercio medio o superior de la vagina, que carece de sensibilidad, no notan la vibración de la bolita interior de las bolas chinas, pero esto es muy frecuente y no significa que no estén siendo eficaces.
Cómo funcionan las bolas chinas.
La vibración que produce el choque de la bolita interior de la bolas chinas contra las paredes de la vagina provoca una contracción involuntaria y continua de los músculos que la rodean, aumentando la circulación sanguínea, la lubricación y el tono muscular.
No es más eficaz usar dos o más bolas chinas al mismo tiempo, incluso puede resultar molesto en las mujeres con el cuello del útero más bajo.
La eficacia de las bolas chinas para mejorar el tono muscular se basa, por tanto, tal y como acabamos de explicar, en dos conceptos:
- Una pequeña bolita en su interior que choca contra las paredes de la vagina cuando las usamos, que puedes llegar a sentir o no.
- El movimiento, que es necesario que hagamos, para que esa bolita se mueva y choque contra las paredes.
Para que el uso de bolas chinas sea efectivo es imprescindible moverse (pasear, caminar, etc.) al llevarlas colocadas, para que la bolita de su interior se mueva y choque contra las paredes de la vagina provocando su contracción involuntaria.
De nada te servirá ponerte unas bolas chinas y tumbarte en el sofá o sentarte a trabajar enfrente del ordenador.
Beneficios de las bolas chinas
Parece demostrado es que el uso continuado de bolas chinas por parte de mujeres adultas y sanas ayuda en gran medida a:
- Mejorar el tono de los músculos del suelo pélvico.
- Aumentar la irrigación sanguínea.
- Mejorar la lubricación natural de la vagina.
De esta manera, con su uso continuado en el tiempo, lograremos una mejoría considerable en la calidad de las relaciones sexuales.
Hablando claro: orgasmos más largos e intensos y recuperación de la sensibilidad sexual cuando, por ejemplo, la hemos perdido tras un parto largo o traumático con fórceps, episiotomía, etc.
Así mismo, un suelo pélvico tonificado y fortalecido ayudará a evitar incontinencias urinarias y disminuir en algunos casos el riesgo de prolapso.
Las mejores bolas chinas: cómo elegir las bolas chinas
Las mejores bolas chinas son aquéllas que mejor se adaptan a tu cuerpo y a tus necesidades concretas.
Como hemos comentado hasta ahora, en principio, cualquier mujer adulta sana y con un mínimo de fuerza en su suelo pélvico podría usar unas bolas chinas.
Pero, ¿qué tengo que tener en cuenta para decidirme por unas bolas chinas u otras?
Yo, particularmente, he basado mi decisión en estas características: medidas, peso, número de bolas en el pack y materiales empleados en su fabricación.
Para vuestra facilidad, tenemos una cuidada selección de bolas chinas en la tienda online de Tienda Erótica.
Medidas de las bolas chinas.
Lo primero que me sorprendió cuando vi por primera vez unas bolas chinas fue su “enorme” tamaño.
Eran dos bolas chinas de sex shop que medirían casi 40 mm y que a mí me parecieron muy grandes y muy pesadas. Luego te das cuenta de que te las puedes poner sin problema.
La medida “normal”, la más habitual, está en torno a los 35 mm. aunque podemos encontrar modelos más pequeños pensados para mujeres que no han dado a luz o que les resulten más cómodas estas más pequeñas.
En cualquier caso, lo importante es que las bolas chinas se mantenga colocadas, no se salgan de la vagina, para que su vibración se transmita a las paredes de la vagina.
Por lo tanto, es lógico pensar que es mejor comenzar por un tamaño más grande y un peso menor.
Peso de las bolas chinas
A pesar de lo que se pueda pensar a priori es mejor empezar por unas bolas chinas de poco peso que podamos mantener sin problema en el interior de la vagina y que nos permitan continuar con la terapia.
Usando unas bolas chinas demasiado pesadas que se salgan con facilidad sólo conseguirás frustrarte y abandonar el entrenamiento.
Además, como ya hemos visto, su eficacia no se basa en el peso.
Número de bolas chinas
Como insisto desde el principio, la eficacia de las bolas chinas no está en colocarse cuantas más mejor, sino en conseguir mantener dentro de la vagina una al menos para que su vibración contraiga involuntariamente la musculatura que la rodea.
Una vez se haya conseguido el tono muscular necesario para llevar colocada, sin contraer voluntariamente, una bola china, podrás pasar a otra de menor tamaño, más peso o unir dos bolas y llevarlas al mismo tiempo.
Es interesante que el fabricante ofrezca varias bolas de diferentes pesos en el pack ya que de esta manera puedes comenzar por una y después combinar varias e ir adaptando el tamaño y peso utilizados a la mejoría y mayor capacidad de retención que progresivamente van a experimentar tus músculos del suelo pélvico.
En el mercado hay una gran variedad de marcas que ofrecen varias bolas en un mismo pack con diferentes tamaños y/o pesos desde 28 g. hasta 100 g. o más.
Materiales de las bolas chinas.
Siendo para un uso tan íntimo qué menos que preocuparnos un poco por qué materiales se están utilizando en la fabricación de tus bolas chinas.
La silicona o el ABS/PC de grado médico, usados especialmente por su carácter hipoalergénico, están ganando terreno ya que suponen una gran garantía de higiene y de que no van a provocar irritaciones ni alteraciones dermatológicas.
Intenta evitar los materiales porosos, el plástico lo es, que pueden contener bacterias.
Presta atención al material del cordón que no sea de hilo, por la misma razón.
Por otra parte, es muy importante informarse de la presencia de ftalatos (DEHP free) o cualquier otro componente tóxico o irritativo entre los materiales de fabricación de nuestras bolas chinas.
Todos los productos que tienes disponibles en nuestra tienda online poseen el certificado de calidad europeo CE que obliga a los fabricantes a pasar unos estrictos controles de seguridad y calidad y a ofrecer al cliente dos años de garantía.